El Golden Sahara es el primer vehículo autónomo de la historia y lo más interesante es que su creación se llevó a cabo en el siglo pasado, específicamente en los años 50s. Si creías que los vehículos autónomos eran tecnología exclusiva del siglo 21, la verdad es que se ha trabajado en este tipo de automóviles desde hace más de medio siglo; siendo el Golden Sahara el primero en implementar esta tecnología.

Historia del Golden Sahara

Erase una vez en una carretera de Sacramento, California, un hombre llamado George Barris quien sufrió una importante avería en su coche. Su Lincoln Capri Hardtop fue rescatado, siendo remolcado por un Chevrolet del año 49. Al momento de avanzar, el Capri se soltó y chocó contra un camión de heno, lo que dió como resultado que la parte superior del automóvil quedase inservible. A pesar de esto la parte inferior quedó intacta, por lo cual Barris decidió restaurarlo y convertirlo en uno de los vehículos más icónicos de la historia.

Junto a su socio Jim Street, Barris comienza una transformación tanto externa como interna del vehículo. Ambos empiezan añadiendo un hardtop transparente en forma esférica, con aires futuristas y también deciden pintar la parte externa, con un color dorado súper llamativo en sustitución de las pinturas de aquella época. Para lograr esa tonalidad el Golden Sahara necesitaba una pintura totalmente innovadora, algo que nunca se hubiera visto en el mercado, pero ¿cómo conseguirlo?

Un día cuando Barris estaba en el mercado de pescado, se percató de color dorado intenso que tenían las sardinas. Fue ahí cuando decidió apostar por utilizar sus escamas mezcladas con pintura de coche, para crear el color oro que tanto anhelaba para su automóvil. Sin duda un método muy original, pero que tenía un pequeño inconveniente: el olor a pescado.

Así es como el histórico diseñador de coches consiguió crear el exclusivo color que le da el nombre a este clásico vehículo. Uno de sus primero trabajos con pintura nacarada que sin duda alguna marcaría una diferencia en su trayectoria.

El Golden Sahara se convierte en el primer coche autónomo de la historia

Por su puesto la pintura de pescado no fue lo único interesante de este vehículo, ya que entre 1956 y 1958, George Barris, Jim Street y Bob Metz, reformaron el aspecto del automóvil hasta conseguir el Golden Sahara II, un prototipo con elementos de coche autónomo que haría historia en el sector automotriz.

En la segunda fase, además de añadir un parabrisas nuevo, faros cuádruples y aletas en la parte posterior, se implementaron mecanismos totalmente revolucionarios para le época: un control remoto de frenado, arranque y aceleración, del motor y de las puertas. Estas mejoras electrónicas llegarían de la mano de Jim Rote quien añadió una palanca de control en el volante para poder realizar un frenado automático. El sistema consistía en unas antenas ubicadas en el paragolpes delantero, que mandaban una señal a los pedales. Así es como nació el primer coche autónomo de todos los tiempos.

Por otra parte, el Golden Sahara II contaba con llantas de color naranja, las cuales estaban hechas de un material conocido como Neothane. Una especie de caucho que permítía tener una luz interna. Todo con el objetivo de tener unos neumáticos que ayudarán a la conducción, mejorando la visibilidad en condiciones climáticas complicadas. Un elemento que fue tan innovador para la industria, que incluso Goodyear decidió llevar a cabo una investigación para hacer unos neumáticos con características similares.

Golden Sahara II una estrella en el sector automotriz

En los años 50s el Golden Sahara II ganó tal popularidad, que incluso realizó un recorrido por todo Estados Unidos, participando en infinidad de eventos de automoción. Incluso apareció en la película Cinderfella (1960) junto a estrellas de la talla de Jerry Lewis, Ed Wynn y Judith Anderson.

Actualmente la compañía Goodyear ha decidido hacer un relanzamiento de este icónico vehículo en el Salón de Ginebra. Restaurado y con cuatro nuevos neumáticos traslúcidos que dicha compañía ha fabricado de forma exclusiva para este automóvil, el Golden Sahara II ha causado sensación entre los más fanáticos de la industria.