Los combustibles fósiles están pasando lentamente a la historia y estamos en un momento al que podemos describir como transición energética. Esto nos llevará a un futuro en donde dominarán las energías renovables y triunfarán los autos eléctricos.

Hoy en día estamos viendo como poco a poco están apareciendo esos vehículos del futuro y un claro ejemplo lo encontramos en los autos eléctricos, impulsados por uno o más motores que utilizan la electricidad que está almacenada en las baterías recargables, la cual se transforma en energía cinética, lo que proporciona movimiento al auto.

Un poco de historia sobre los autos eléctricos

Aunque puede pensarse que los autos eléctricos son una auténtica novedad, lo cierto es que sus orígenes se remontan al siglo XIX. Su fabricación se remonta a la primera mitad de 1800, donde Robert Anderson diseñó el primer auto dotado de motor eléctrico: Se alimentaba a través de una batería no recargable y su velocidad máxima era de 3,7mph (aproximadamente unos 6 kilómetros por hora)

Lo que hizo que abandonase el proyecto fue que viera cómo andando se llegaba antes a los lugares. Hasta que no se avanzó en la tecnología que todos conocemos actualmente prácticamente no se volvió a hacer mucho más con los autos eléctricos.

Actualmente se pueden encontrar baterías de iones de litio que pueden proporcionar una autonomía considerable y en cuanto a motorización, pueden alcanzar altas velocidades. Además, gracias a las baterías recargables, los autos eléctricos pueden fabricarse en serie y cada vez son más accesibles y rentables, dejando patente que este es uno de los futuros de la automoción, no solo en México sino en todo el mundo.

Dentro de las principales características con las que cuentan los autos eléctricos destaca su capacidad por prescindir de los combustibles fósiles, por tanto, no usan los carburantes que todos conocemos. No emiten agentes contaminantes hacia la atmósfera, algo que ahorra un notable problema al medioambiente, sobre todo en lo relacionado con el cambio climático.

Actualmente podemos encontrar un gran número de motorizaciones eléctricas diferentes, de toda clase de tamaños y rendimientos así como sencillez o complejidad.

Posiblemente muchos de ustedes estarán pensando que si se trata de autos que son tan buenos… ¿por qué no lo son todos? Aunque se ha avanzado mucho en la producción de estos vehículos, todavía hay muchos aspectos que deben ser tenidos en cuenta y que se deben mejorar.

La autonomía es uno de los hándicaps que podemos encontrar, sobre todo si la comparamos con los autos de carburantes tradicionales. No son de los más asequibles que podamos encontrar en el mercado debido a que aún se están desarrollando y no existe una gran competitividad en el mercado.

Otro punto a tener en cuenta es que no hay puntos de recarga suficientes y que las baterías demoran varias horas para estar cargadas al 100%. Aún con todo esto, los autos eléctricos están ganando mucho terreno a los que nos han acompañado durante las últimas décadas.

Principales partes de un auto eléctrico

Para conocer un poco más sobre los autos eléctricos podemos revisar sus principales partes, las cuales son prácticamente iguales a los modelos convencionales, solo diferenciándose de las partes relacionadas con el sistema eléctrico.

El motor es lo más diferente que podemos encontrar. Tiene como misión transformar la energía que se encuentra almacenada en las baterías en energía cinética y hace que el auto se desplace. Pero ese movimiento también se utiliza para generar electricidad, lo que va almacenándose en las baterías, sobre todo cuando se conduce en una pendiente descendente.

Las baterías son los dispositivos que almacenan la energía eléctrica para alimentar al motor. Actualmente existen autos que cuentan con una batería auxiliar para evitar quedarse tirado en la carretera.

Los transformadores tienen como finalidad convertir los diferentes parámetros de la electricidad en lo necesario para poder recargar las baterías. Actualmente, existen autos que pueden funcionar tanto con corriente alterna como continua. Otro de sus cometidos es la refrigeración del auto, evitando explosiones o derrames.

También podemos encontrarnos con los controladores, encargados de regular la entrada de la emergía a la batería. Con ello se equilibra la recarga de forma correcta, con lo que alargar la vida útil y no deteriorar la batería.

Otra parte de gran importancia, e indispensable, en los autos eléctricos es el puerto de carga, que no deja de ser un enchufe donde el auto se conecta a una fuente de alimentación que se encarga de recargar la batería.

Ventajas e inconvenientes de los autos eléctricos

Los autos eléctricos no solo son respetuosos con la polución dado que no emiten ningún agente perjudicial para la atmósfera, también son respetuosos con el ruido, reduciendo notablemente la contaminación acústica que vivimos en las grandes ciudades de México, sobre todo en el DF.

El motor puede llegar a ser igual de potente y es más asequible. Dependiendo del modelo, los motores pueden llegar a tener la misma potencia que uno convencional, siendo incluso más fiables y compactos, lo que hace que los autos eléctricos puedan ser mucho más pequeños.

Son autos increíblemente eficientes, llegando a un 90% de eficacia frente a un 30% de los autos convencionales. Consumen mucho menos y se ahorra más, requieren menos energía para poder realizar el mismo esfuerzo, aunque las baterías, de momento siguen teniendo poca autonomía, aunque se están dando pasos de gigante y aumentando la capacidad y autonomía.

Dentro de los inconvenientes que tienen estos autos se destaca la falta de suficientes puntos de recarga, lo que hace que no sean autos completamente independientes y está siendo uno de los lastres para los usuarios a la hora de adquirir un vehículo como estos.

La autonomía es uno de sus inconvenientes más destacables. No se puede hacer un viaje largo sin haber recargado la batería durante unas cuantas horas. De momento, los autos eléctricos están diseñados sobre todo para moverse por zonas urbanas.

Para finalizar, la potencia de los autos eléctricos más modernos es impresionante, algo que no sucede con los utilitarios para la ciudad. No se pueden alcanzar aceleraciones ni velocidades punta como los autos convencionales y el precio de las baterías es caro y tienen una duración aproximadamente unos 7 años.